Llevamos varios meses en Zinkia y con Pocoyo, trabajando en el desarrollo de un proyecto en Angola y para Angola. Pocoyo lleva mucho tiempo ya presente en Angola y es muy querido por sus niños allí.
En estos últimos días, después de la vuelta de mi primer viaje del que escribía en este blog, he tenido una atención más cercana hacia noticias y estudios publicados recientemente sobre el continente africano, sus ciudadanos y su futuro.
Me gustaría compartir de una manera breve algunos de los datos que más me han llamado la atención…
En primer lugar, hacer una reflexión con la mirada sobre el tamaño real de Africa con respecto al resto del mundo y en particular con respecto a los países hoy considerados como entre los más importantes. La foto de debajo es significativa
En segundo lugar, el poder de la gente. El poder del crecimiento de la población.
También en un post anterior hablaba de un análisis realizado por el sociólogo y catedrático español Emilio Lamo de Espinosa que me había llamado la atención por su simplicidad y por sus consecuencias. Repito lo que decía: «…En 1,950 el 25% de la población mundial era europea. Hoy es sólo el 8% de la población mundial y en muy poco tiempo no superará el 6%. Lo que resta una enorme capacidad de poder a Europa y cada vez menor control del futuro. Las tecnologías se difunden cada vez con mayor rapidez. Esa difusión de las tecnologías hace que la productividad se iguale cada vez más entre los diferentes mercados. Cuanta más población, más productividad si la brecha tecnológica ya no es importante. El crecimiento demográfico se convierta en poder. Esta simple reflexión explica que la historia ya no se escribe, ni se escribirá por mucho tiempo, en Occidente. Europa escribió durante muchas generaciones el futuro del mundo. Ahora le toca que otros se la escriban a ella…»
Esta es la realidad de Africa
Sus ratio de crecimiento superan en mucho los ratios de otros países. Y las civilizaciones occidentales empiezan ya a dejarnos atrás y lo que es peor, empiezan a ponernos en evidencia en estos asuntos.
Esto además les hace ser enormemente optimistas.
Un optimismo que en muchas partes de los que era el mundo desarrollado, se ha perdido. El optimismo europeo y norteamericano ha dejado paso al pesimismo. Y si no es pesimismo, en el mejor de los casos… es conformismo. Lo que es igual de malo.
El optimismo de Africa y cómo sus ciudadanos ven con ilusión su futuro recuerda a los «felices años 60, 70 y 80» en Europa y Norte América.
No es un espejismo.
Estas son algunas de sus cifras y algunas de sus previsiones:
Los que no lo hayan hecho todavía… hay que empezar a mirar hacia Africa con detenimiento. Lleva el camino de convertirse en un corazón necesario, que late y da vida al resto del mundo y tiene mucha pinta también de poder llegar a ser de nuevo una de las más importantes despensas del mundo.
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Jose Maria Castillejo
José María Castillejo, emprendedor y empresario. Fundador y desarrollador, entre otras empresas, de Zinkia Entertainment, S.A., la creadora de Pocoyo.
