Estoy en Mallorca y tengo a la vista el Castillo de Santueri, en Felanitx.
En este castillo, construido sobre una importante elevación montañosa y desde el que se divisa casi toda la costa Norte y Este de la isla de Mallorca, Menorca y Cabrera, una inexpugnable atalaya defensiva, es donde se supone que tuvieron lugar los hechos que relata Gabriel Verd Martorell en su libro “CRISTÓBAL COLÓN y la revelación del enigma”.
Si lo que cuenta Gabriel Verd fuera cierto, que parece muy posible que así sea, se puede pensar de una manera seria y rigurosa que realmente Cristóbal Colón nació Mallorca, no en Génova, como una gran parte de los historiadores sostienen y era por tanto mallorquín.
Volvemos, más o menos, a la misma época que revisaba recientemente en los post sobre Ludovico el Moro de Milán y el fresco de La Ultima Cena de Leonardo da Vinci.
Juan II de Aragón, nacido en Medina del Campo el 29 de Junio de 1,398, era hijo de Fernando I de Aragón. A su vez, era hermano de Alfonso V el Magnánimo. Alfonso, casado con Maria de Castilla, no tuvo descendencia legítima y por tanto Juan, su hermano, le sucedería en el trono de Aragón. Juan II de Aragón era también cuñado de Juan II de Castilla, por el matrimonio de este último con la hermana de Juan, María de Aragón.
El 18 de Junio de 1.420 Juan II de Aragón se casó en Pamplona con Doña Blanca de Navarra. Era el segundo matrimonio de Doña Blanca y todo un matrimonio de Estado: en caso de tener descendencia se unificarían los Reinos de Aragón y Navarra. Doña Blanca era la hija mayor de Don Carlos III de Navarra, conocido como el Noble y de Doña Leonor de Castilla. Había sobrevivido a dos hermanos, Carlos y Luis que fallecieron siendo niños.
Del matrimonio entre ambos, menos de un año después de casarse, nació en Peñafiel, el 29 de Mayo de 1.421, Don Carlos de Trastámara, nieto por tanto de Don Carlos III de Navarra y conocido también como Carlos IV de Navarra o más comúnmente, como el Príncipe de Viana. Fue el primero en llevar ese título y para quien Don Carlos III lo instituyó como heredero de la corona de Navarra. Un dato curioso: sus padrinos de Bautismo fueron su tío Juan II, rey de Castilla y Don Alvaro de Luna, el valido de Juan II de Castilla. Ambos se convertirían en grandes enemigos de su padre poco tiempo después de este Bautismo.
Cuando Carlos, Príncipe de Viana contaba con 20 años de edad, fallece su madre, la Reina de Navarra. Su padre, Juan de Aragón, que era el heredero de la Corona de Aragón como hermano de Alfonso V, en vez de permitir que se nombrase Rey de Navarra a su hijo primogénito como heredero único de Blanca de Navarra y tal y como había pedido su difunta esposa y madre de Carlos en su testamento, no le permite recibir la Corona. Comienza desde ese momento una pelea con su hijo, que durará hasta la muerte de Carlos.
Primero Juan de Aragón batallando contra su propio hijo, después obligándole a batallar contra su segunda esposa y madrastra, Doña Juana Enriquez que pretendía la corona de Navarra para sus hijos, aunque no les correspondiera ningún derecho y más tarde obligándole a huir a Nápoles en busca de la protección de su tío Alfonso V, muy anciano ya, pero todavía vivo y Rey de Aragón y Nápoles.
A la muerte de su tío Alfonso V, intentó Don Carlos aproximarse a su padre.
Juan heredó la Corona de su hermano y se convergió en Rey de Aragón, con el nombre de Juan II de Aragón. Carlos pensaba que su padre, una vez alcanzada la Corona por fin le apoyaría a el para poder reinar en Navarra, el Reino del que era propietario.
Llegó incluso a pedirle a su padre que le apoyara en su proyecto de casarse con Isabel de Castilla, la hermana del rey Enrique IV. La que sería conocida como Reina Isabel la Católica, aunque en ese momento todavía era sólo la hermanastra del Rey de Castilla. Era un matrimonio para el que Carlos contaba con la aprobación del propio Rey de Castilla, hermanastro de Isabel. Si Enrique IV conseguía casar al Príncipe de Viana con su hermana, evitaba que se casara con Doña Catalina de Portugal. Pero el padre del Príncipe, Juan II de Aragón, tenía planeada la boda con Isabel para otro de sus hijos: Fernando. Una vez más, Doña Juana Enríquez, segunda esposa del padre de Carlos, batallaba contra Carlos.
En vez de ayudarle, Juan II engañó a su hijo y le pidió que se fuese a Mallorca a tomar posesión de los Castillos que le correspondían como Rey de Mallorca. Una vez que desembarcó en la isla, lo apresaron y lo llevaron detenido al Castillo de Santueri. El mismo Castillo que ahora tengo frente a mis ojos.
Todo esto ocurrió entre el 28 de Agosto de 1.459 y el 28 de Marzo de 1.460 cuando Carlos partió desde Barcelona, donde había sido recibido con los honores de Rey que le correspondían. Del recibimiento real en Barcelona, a la prisión por la traición de su padre. Una prisión que le acompañaría de castillo en castillo hasta el final de sus días. El padre buscaba una renuncia a sus derechos que nunca conseguiría de su hijo. El 23 de septiembre de 1.461, poco más de un año después de salir de Mallorca y a los cuarenta años de edad, falleció en el Palacio Real de Barcelona.
Don Carlos fue desafortunado en lograr su objetivo de alcanzar un trono que le correspondía por derecho y por sangre. Sin embargo, fue enormemente afortunado en la respuesta a sus amores.
Está probado que, si bien no tuvo hijos de su matrimonio con Doña Inés de Cleves, de la que enviudó muy poco tiempo después de casarse, si los tuvo de tres mujeres a las que cortejó y con las que nunca se casó: Doña María de Armendáriz, de quien nació Doña Ana de Navarra y Aragón. Doña Ana se casó con Don Luis de la Cerda, V Conde y I Duque de Medinaceli. Tuvo un hijo también con Doña Brianda Vaca, de quien nació Felipe, conde De Beaufort y otro hijo más de una tercera dama llamada Margarida Capa, de quien nació Don Juan Alfonso de Navarra y Aragón, que llegaría a ser Obispo de Huesca.
Fue por tanto, bastante prolífico en sus relaciones amorosas y tuvo hijos a los que reconoció de cada uno de estos amores. Pero no fueron éstas las únicas relaciones que mantuvo. Hubo otras cuantas también conocidas, como con Doña Catalina de Portugal, que una vez fallecido el Príncipe ingresó en el Convento de Santa Clara de Coimbra donde pasaría el resto de sus días.
La teoría que defiende Gabriel Verd en su libro, citando el libro de Manuel Iribarren “El Príncipe de Viana, un destino frustrado” es que hubo también una mujer en su vida mientras estuvo preso en el Castillo de Santueri: Margarita Colom. Para probarlo, esgrime un documento escrito por el propio Príncipe al Gobernador de Mallorca, fechado el 28 de Octubre de 1.459 en el que textualmente le dice: “Agredecemos mucho lo que fecho haveys en recomendación de Margarita, la verdad de la cosa mostrará lo que haveys sentido de ella ser prenyada”. Si había llegado en agosto y para octubre ya sabía que Margarita estaba embarazada, el niño debió nacer en junio de 1.460. El hijo de ambos tendría un poco más de un año cuando murió Carlos.
“Esta Margarita era hija de Juan Colom, padre de unos prófugos mallorquines que estaban al servicio de Don Renato de Anjou, que vivía entonces en el municipio de Felanitx, en una finca denominada Sa Alquería Roja, actualmente Son Ramonet, situada a unos dos kilómetros de la villa de Felanitx y en las proximidades del Castillo de Santueri” Gabriel Verd, “Cristóbal Colón y la revelación del enigma” Pag. 62. Los hermanos prófugos habían tenido que huir de Mallorca tras liderar una revuelta contra los nobles locales y habían recalado en Génova, donde se ganaban la vida al servicio de Don Renato.
A partir de aquí empieza todo un relato que justifica y explica la vida de Cristóbal Colón desde esta perspectiva.
Invito a buscar el libro que cito, leerlo y sacar cada uno sus propias conclusiones.