Es muy común hoy en día oír hablar de emprendedores, de espíritu emprendedor y de lo importante y necesario que es para la economía que haya personas que quieran y estén dispuestos a asumir el riesgo de arrancar una nueva empresa y poner en ella toda su ilusión, esfuerzo, trabajo, imaginación, talento y capacidad creativa.
Normalmente lo que hay detrás de cualquier iniciativa de este tipo es dar solución a una necesidad, cubrir un hueco y sobre todo innovar haciendo algo que hasta ahora se ha venido haciendo, pero de una manera diferente. Y uno de los objetivos fundamentales para los emprendedores o empresarios que hay detrás es, desde luego, poder ganar dinero haciéndolo.
He descubierto recientemente un proyecto que me ha llamado enormemente la atención y me ha gustado mucho: May Feelings. Me he convertido en usuario suyo y me encanta haber podido hacerlo. El objetivo que hay detrás de May Feelings: cambiar el mundo. Casi nada. La fórmula para hacerlo: la oración. Sin lugar a dudas, la más poderosa para los que tenemos fe. Aunque no siempre funcione como nos gustaría a nosotros que lo hiciera. Desde luego es innovador, ambicioso y, desde mi punto de vista, muy atractivo.
Quisiera desde estas lineas transmitir mi más sincera felicitación a todo el equipo que ha hecho y hace realidad esta nueva red social.
Una de las herramientas que nuestra sociedad moderna tan actual y tan desarrollada parece que ha perdido, es la ayuda entre nosotros. El apoyo y la generosidad entre seres humanos durante siglos y generaciones ha cohesionado familias, culturas y civilizaciones y sin embargo hoy ha casi desaparecido en aras de los templos del dinero, la rentabilidad, el yo por delante de todo y el hedonismo. Creo que es un inmenso error que ya estamos pagando de muchas maneras. Todas ellas tristes y desoladoras. Tristes y difíciles para seres humanos, para familias y para naciones completas. Nuestra civilización está enferma. Está sufriendo y está pasando por momentos que considero difíciles y desde luego de cambio y de transición.
Un proyecto como May Feelings viene a recuperar una parte muy importante de esa generosidad tan necesaria para que los cambios sean buenos y sean los necesarios. Para que la buena convivencia entre nosotros vuelva a resurgir y para que la paz y el amor entre las personas sean la guía a seguir en el comportamiento humano.
No creo que haya forma más humana, mas humilde y al mismo tiempo más poderosa, que pedir oraciones a otros por necesidades que tenemos o que tienen seres humanos que conocemos. Y poder conseguir que otros, en muchos casos, desconocidos para nosotros oren por esas intenciones.
Les deseo el mayor de los éxitos. Como idea, desde luego, no creo que pueda ser mejor. Como proyecto y empresa ojalá crezca y se convierta en una gran comunidad de la que muchos podamos disfrutar y además aportar nuestro pequeño grano de arena en ese gran objetivo de cambiar el mundo para mejor.